Under Construction no es un lugar concreto de Madrid, pero
sin embargo, es un sitio bien conocido y sufrido por todos los madrileños.
Under Construction puede aparecer de repente en cualquier
esquina, en cualquier calle o plaza, puede aparecer en un breve espacio de
tiempo o bien puede perpetuarse a lo largo de los días.
La primera foto está tomada en la Plaza de Canalejas, ayer,
ubicación de las sedes centrales de las primeras firmas del sector bancario,
mañana, sede de hoteles, centros comerciales y viviendas de lujo, que en
este país es lo que prima. En este país, es muy raro que se priorice construir
industria, innovación, educación o cultura.
En la segunda foto vemos parte del
edificio España desde la Plaza de Ramales, este emblemático edificio lleva años
cerrado, y bajo la denominación pre-under construction, edificio que tiene sus
entrañas vacías, vacías hasta de querer o saber hacer algo con ellas, esperemos
que un buen día nos sorprendan…
Volviendo a Canalejas, la historia de este hombre y de su
asesinato, ocurrido en 1912, podría representar muy bien quién somos y a dónde
vamos. Canalejas, político de comienzo republicano para luego volverse liberal
y jefe del Gobierno en el momento de su asesinato, intentó introducir algunos
cambios dentro de la estructura política y social española, entre otros,
democratizar el ejército, modernizar sociedad, clero y monarquía, unir, según
intereses, a conservadores y progresistas para fines comunes, pero al final no
consiguió nada, miento, consiguió dos cosas, la primera que todos se pusieran
en su contra y la segunda, que le pegaran un tiro mientras observaba el
escaparate de una librería. ¡Una librería! Los dirigentes actuales ya lo dejan
muy claro, la cultura es mala, muy mala.
Respecto
a su asesinato y su asesino, Manuel Pardiñas, la historia toma tintes
surrealistas, pero de consecuencias un tanto dramáticas. No se conoce muy bien
los motivos del anarquista Pardiñas para asesinar a Canalejas, incluso algunos
dicen que no era su principal objetivo, que, rizando el rizo, estaba por la
zona para atentar contra Alfonso XIII, pero debió reconocer a Canalejas que
andaba solo por allí y cambió de objetivo, en fin… visión e interés, a la española, por aclarar
los hechos. El caso es que ese asesinato, entre algunas medidas más, trajo
consigo la creación de la nefasta y temida posteriormente, Dirección General de
Seguridad, para mayor gloria del régimen.